Ejemplo en la crisis actual: Tenemos muchos. El despilfarro es sinónimo de la gestión pública en la mayoría de las corporaciones locales, empresas públicas, gobiernos autonómicos, cabildos, diputaciones o gobierno central. En este país, de lo público, el político de turno, puede hacer y deshacer; "y si te vi, no me acuerdo". Veamos lo que decía el semanario alemán Der Spiegel, en Abril de este año, a cerca de una historia que ilustra perfectamente lo escandaloso de nuestra situación. Se refería a la Alcaldesa de Madrid, cuyo único “mérito” es ser la señora de Aznar. El semanario no daba crédito, “el ayuntamiento es un palacio cuya remodelación ha costado 500 millones de euros”, “su despacho es mayor que el del Presidente de los Estados Unidos”, tiene “un mayordomo cuya única función es servir el café a ella y a sus invitados”.
Dice más adelante, el artículo del semanario: "A
diferencia del Presidente, Botella no puede culpar a un rival político de
la izquierda por los hábitos del despilfarro pasado en la ciudad. Fue su predecesor, un conservador, que aumentó la deuda de
Madrid por un factor de cinco. Tenía
un anillo de autopistas construidas alrededor de la ciudad y la candidatura de
Madrid como ciudad anfitriona para los Juegos Olímpicos por dos veces.
En
el proceso, se gastaron muchos millones en estadios que ahora están infrautilizados.
La nueva alcalde quiere continuar la apuesta de la ciudad para los Juegos Olímpicos
de 2020, argumentando que la mayoría de la infraestructura ya ha sido
construida,--y que también es importante para una sociedad, sus sueños."
Enlace al texto original en Der Spiegel
No hay comentarios:
Publicar un comentario